En algunos de los últimos artículos publicados, ya hemos hecho referencia más de una vez a la importancia de apelar a las emociones del cliente, así como propiciar la participación de éste con la marca. Esta tendencia la resume la técnica de la gamificación, la protagonista del artículo de hoy, la cual integrada con otras herramientas de marketing puede reportar grandes beneficios en cuanto a fidelización de clientes, dinamización de procesos, promoción y reputación de marca.
En los últimos tiempos, la gamificación ha entrado pisando fuerte en el universo del marketing y la publicidad, y cada vez son más las compañías que la incluyen en sus estrategias. Este concepto hace referencia a la integración de técnicas y dinámicas propias del juego en diversos contextos, que tienen como fin fomentar la participación y el cambio en el comportamiento del usuario.
La aplicación de técnicas de gamificación en las estrategias de marketing puede presentar un gran número de ventajas para una marca o empresa. La meta es que el usuario se sienta partícipe de lo que hace la compañía para crear engagement con respecto a una marca, producto o servicio determinado. De esta manera, será más fácil lograr la fidelización de los clientes.
Conseguir la participación del cliente es la base de la gamificación, que tiene como principal objetivo el establecimiento de una comunicación bidireccional que genere feedback. Se trata de crear vínculos emocionales entre una marca y sus usuarios para fomentar su fidelización y provocar sentimientos de pertenencia dentro de una comunidad.
Actualmente, estas técnicas presentan un gran abanico de posibilidades de cara a su implantación dentro de una estrategia de marketing. Las más comunes son las tarjetas de fidelización y los sistemas de puntos, muy efectivos en las campañas de fidelización. Estas dinámicas se basan en la recompensa, de manera que los clientes de una marca reciben puntos canjeables para futuras adquisiciones. De esta forma, se promueve la repetición de la experiencia por parte del usuario, afianzando su lealtad hacia la marca.
La innovación y la creatividad juegan un papel fundamental en este ámbito. El desarrollo de mecánicas propias basadas en la gamificación puede presentar grandes oportunidades de cara a potenciales clientes. Por ejemplo, a través de la creación de una aplicación móvil, basada en un juego de recompensa y relacionado con la compañía, se pueden reforzar los vínculos entre la marca y los usuarios de una manera divertida.
Como conclusión, integrada con otras herramientas de marketing, la gamificación puede reportar grandes beneficios en cuanto a fidelización de clientes, dinamización de procesos, promoción y reputación de marca.
Fuente:
http://www.marketingdirecto.com/actualidad/digital/gamificacion-juguemos-a-hacer-marketing/
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